El color verde y la intención de crear un espacio acogedor son el hilo conductor de este proyecto: la reconversión de una antigua oficina para devolverla a su uso original de vivienda.
Ante la distribución de un espacio de trabajo oscuro y fragmentado con despachos y materiales obsoletos, MLKT propone una reforma integral recuperando su uso original.
La propuesta se centra en tres acciones. El juego de la luz natural y artificial para matizar cada rincón, el uso del color y la madera para conseguir una vivienda cálida y con identidad, y la demolición de algunas divisiones dando lugar a un espacio común compuesto del salón, comedor y estudio muy amplio y abierto, tan solo dividido por unos muebles celosía que dotan de personalidad al hogar.
El núcleo verde que contiene en su interior las zonas húmedas se convierte en el eje central en torno al cual gira la vida de esta villa Esmeralda.
